25 noviembre, 2009

El evangelio en el deporte

Pocas veces me detuve a pensar que actividades cotidianas o que a mucha gente le gustan, son herramientas realmente útiles para dar a conocer el mensaje del evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

Hace unas semanas, un matrimonio joven llegó a nuestra Iglesia, Brendan originario de Australia pero que radica en Escocia, donde conoció y se unió a su ahora esposa Kate. Ellos pudieron compartir con nosotros lecciones prácticas de lo que ellos realizan en el ministerio deportivo, específicamente consiste en utilizar el fútbol (deporte mundialmente conocido y querido) con ilustraciones del juego, y dar una semejanza a la vida cotidiana, siempre con verdades bíblicas claras, que brindan al niño la facilidad para comprenderlas, pues el punto importante es crear un puente entre el niño y la iglesia, tomando el juego como herramienta práctica y divertida.

El fin de semana tuvimos un campamento en donde compartieron experiencias, su testimonio y el trabajo que ahora hacen con los "Campamentos de Fútbol" que a lo largo de ya varios paises, han ganado muchas almas para Cristo, han transformado vidas, han hecho llegar el mensaje de amor a niños que quizá de ninguna otra manera lo hubieran escuchado.

Gracias doy a Dios porque através de nuestros hermanos Jones (así se apellidan), nos recuerda que no es suficiente asistir a una iglesia, y es que estamos tan acostumbrados a entrar y a salir, a escuchar y a cantar, que olvidamos que el trabajo más duro pero más importante a la vez, es afuera, donde viven millones de almas perdidas y con una enorme necesidad del amor de Dios.

Esto no significa que todos ahora tenemos que jugar futbol, más bien se traduce en una búsqueda incansable por distinguir el don o dones, claro está, que Dios nos ha dado y que podemos utilizar para llevar las buenas nuevas de salvación, actividades deportivas, actividades manuales, intelectuales, musicales, que se yo! debe haber infinidad de ellas, y en una hay un lugar para tí! en espera de que decidas tomar el arado y no voltear atrás y decir: "Heme aquí, envíame a mí"


Es hora de levantarnos del sueño!! No sabemos cuánto tiempo nos quede para intentarlo! pero es nuestro compromiso, y es además todo un privilegio ser portadores de tan sublime y hermoso mensaje de amor.

1 comentarios:

Eduardo Roldán Reyes dijo...

¡Que bendición!Me hubiera gustado tanto estar allí con ustedes, bueno ya pronto!!!

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